Le amputaron tres dientes a ella, puedes lamer sus encías llenas de gérmenes. Y también le amputaron una pierna. El muñón no se ha curado bien, cuesta acariciarlo. Pero ella quiere que le acaricien el muñón, así que tú también lo harás. El fetiche de la amputación, no es un fetiche bonito, atestigua el sufrimiento, la enfermedad y la miseria. En la guerra, te habría gustado, había brazos y piernas por todas partes, habrías tenido una erección en los pantalones a todas horas. El brazo se va, el muñón cicatrizado se queda, bueno para nada más que para ser acariciado por ti. ¿Qué te pone cachondo? ¿Los dedos de los pies amputados o cuando la pierna termina justo por debajo de la rodilla? ¿Te pone cachondo cuando las cicatrices del muñón sobresalen bruscamente, te parecen interesantes los muñones frescos? Tu mundo parece estar fuera de lugar.
CHARLA PROFUNDA SOBRE EL FETICHE DE LA AMPUTACIÓN
Nada es tan estresante como un fetiche que no puedes vivir. Esto se aplica sobre todo a un fetiche tan delicado como el de la amputación. ¿Vagabundeas por la puerta del hospital y buscas mujeres con miembros amputados en el rincón de los fumadores? ¿Te acercas a ellas y les preguntas si puedes lamerles el muñón? Probablemente te acobardas, no eres lo bastante valiente para esas acciones, te faltan agallas. Sólo sueñas con hacerlo, probablemente ves porno fetichista de amputaciones y te masturbas hasta que no te sale nada. Eso es muy triste, ¿no? ¿Por qué no tienes citas fetichistas y vives tu fetiche de amputación? El circo de las perversiones te ofrece parejas sexuales a las que les faltan partes del cuerpo. Por fin puedes vivir tu fetiche de amputación y tener sexo con amputados. Tal vez empieces por algo pequeño y chupes un dedo amputado.
CUANDO LO QUE YA NO ESTÁ TE PONE CACHONDO
Un buen muñón es como un jamón precioso, si tienes suerte puedes sentir el hueso. El cirujano se lo ha quitado, ha cortado la carne superflua y deshecho de ella. Lo que queda es el muñón con la cicatriz, carne muy tierna, fina para lamer y si frotas tu pito contra ella, entonces se pone completamente rígido. También te conseguiremos mujeres sin piernas, así tendrás una mujer a la que follar y dos muñones en los que podrás ensañarte. Muerde el muñón de un brazo, el tejido puede soportarlo, sólo muerde fuerte. Tienes un bonito fetiche ahí, tú mismo te das cuenta, ¿no? Estaríamos avergonzados si tuviéramos un fetiche de amputación, honestamente, estaríamos avergonzados hasta la médula. Pero antes de que hagas una estupidez, te conseguiremos parejas sexuales con muñones, podrás tener citas sexuales con ellos y vivir tu fetiche de amputación.
LAS PAREJAS SEXUALES A LAS QUE LES FALTAN PARTES DEL CUERPO SON LAS MÁS SEXYS
¿Te molestan una o dos partes del cuerpo? ¿Su pie izquierdo te parece superfluo, extraño y fuera de lugar? Esto también puede ser un fetiche de amputación, te pondrá cachondo deshacerte de lo superfluo, te hará feliz. No seas tonto, aprovecha la oportunidad que te ofrecemos. Ningún portal de citas del mundo te ofrece contactos sexuales amputados, sólo nosotros lo hacemos, desde el Circo de las Perversiones. Nos importas, nos importa tu fetiche, eres un friki, eres uno de los nuestros, por eso organizamos contactos sexuales adecuados para ti. Sin nosotros, te lo juramos, te irás a la tumba sin haber olido nunca un muñón. Sólo hay un camino, no hay alternativa, al menos ninguna que sea legal. Tú lo quieres, tú quieres tocar y dar placer a los muñones. Nuestros miembros tienen muñones y quieren que les toquen.
CITAS SEXUALES CON PERSONAS A LAS QUE LES HAN AMPUTADO PARTES DEL CUERPO
La represión no funciona, hace daño al cuerpo y al alma quedarse al margen del fetiche. Ese es el quid del fetiche, no es sólo el fetiche de la amputación, todos los fetichistas lo sufren. Hasta ahora podías soportarlo, te dolía, pero podías soportarlo. Ahora nos conoces, ahora sabes dónde encontrar parejas sexuales con las que vivir tu sucio fetiche de la amputación. Lo llevas grabado a fuego en el alma, el circo de las perversiones te ha infectado, ahora nos conoces, ahora estás condenado. Siempre puedes ir a una cita sexual, tocar un muñón, olerlo, besarlo y lamerlo. ¿No quieres hacerlo? Es culpa tuya, volverás, porque todo el mundo vuelve, ya lo hemos visto antes. Acudes a los fenómenos del circo cuando nos necesitas, y ya nos estas necesitando.
